Descubre el queso Raclette, un verdadero tesoro de la gastronomía suiza que se ha convertido en un imprescindible para los amantes del queso en todo el mundo. De pasta semiblanda y color amarillo pálido, este queso se caracteriza por su textura suave y su sabor intensamente lácteo con ligeras notas afrutadas y toques a nuez. Es ideal para fundir, liberando una cremosidad irresistible que lo hace perfecto para compartir en una comida cálida y acogedora.
Es elaborado principalmente con leche de vaca de alta calidad, siguiendo tradiciones centenarias que respetan la pureza del producto. Su maduración suele ser de entre 3 y 6 meses, lo que le aporta una complejidad aromática única sin perder su suavidad característica.
Para disfrutar al máximo del queso Raclette, caliéntalo hasta que se derrita ligeramente y viértelo sobre patatas cocidas, acompañadas de pepinillos y embutidos.