El queso Appenzeller es una de las especialidades más tradicionales y apreciadas de Suiza, originario de la región de Appenzell. Este queso de pasta dura, elaborado con leche cruda de vaca, destaca por su inconfundible sabor aromático y ligeramente especiado, que se consigue gracias a su proceso de maduración y tratamiento con una mezcla secreta de hierbas, vino blanco y especias locales. Este secreto le confiere al Appenzeller su carácter único, haciéndolo un producto gourmet de alta calidad.
Maduración aproximadamente de 3 a 4 meses, durante los cuales se frota con una salmuera de hierbas que realza sus matices aromáticos. Ofrece un sabor equilibrado y lleno de matices, con notas a nueces, hierbas frescas y especias. Su sabor es suave pero con una complejidad que lo hace persistente en el paladar, combinando sutiles toques dulces y salados. Textura semidura, con una pasta firme y elástica que se vuelve más quebradiza a medida que madura. Perfecta para cortar en finas lonchas o cubos. Aromático e intenso, con notas herbales y ligeramente picantes, que provienen del frotado con la mezcla secreta de hierbas y vino durante su maduración.
El Appenzeller es un queso con una personalidad única, ideal para quienes disfrutan de quesos con un sabor complejo pero no demasiado fuerte.
Es ideal para tablas de quesos, acompañado de frutos secos como nueces o almendras, y frutas frescas como manzanas o peras, que complementan sus notas especiadas. También es excelente para fundir en platos tradicionales como el fondue o la raclette, donde su sabor especiado aporta una profundidad extra.